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| Autor desconocido. Edición por MoonsDream. |
Le dijo adiós. Sabía que quizá era la última vez que lo
viera, y un nudo le amordazaba la garganta y le encogía el corazón,
convirtiéndola en algo pequeño, un mínima parte de sí misma.
Aún no se había ido, pero ella ya le echaba de menos. Con
todas sus fuerzas. Más de lo que realmente podía soportar.
Él la miró a los ojos mientras subía al tren. Sonrió, pero
la sonrisa no iluminó sus ojos, esos
ojos que normalmente iluminaban el mundo. Su mundo. Ella le devolvió la
sonrisa, pero el nudo de su garganta se apretó aún más y tuvo que luchar por
contener las lágrimas.
Finalmente el tren comenzó a moverse, y ella lo vió
alejarse. Y le dijo adiós.
El vacío que dejam ciertas personas lo llenan los recuerdos... Breve pero intenso, vello de punta al rememorar...
ResponderEliminarPrecioso texto. Me gusto muchísimo, y me emociono al hacer que recordarse. No tengo palabras para describir lo que he sentido al leerlo, corto, pero como dijo el Anónimo, intenso.
ResponderEliminar¡Muchos besitos!
duele...ese adiós, la despedida...qué intenso!!
ResponderEliminaremocionante!!
Un beso!
Las despedidas son algo muy doloroso y más si ese alguien que se marcha es tan importante.
ResponderEliminarCreo que soy nueva por aquí. Un placer leerte ♥ http://somethingstriggeredmma.blogspot.com.es/
(yo intento decirle adiós al tren, pero nada. Me sigue costando horrores)
ResponderEliminarabrazos (que van y vienen)
relámpago
Odio las despedidas y he sentido mucha nostalgia al leerte, pero eso es bueno porque con tus palabras has trasmitido mucho.
ResponderEliminarUn beso desde http://our-light-house.blogspot.com.es/